viernes, 15 de marzo de 2013

Opinólogos, todos.

Todo el mundo tiene derecho a opinar diferente. De hecho, todo el mundo opina diferente. Todo el mundo debe respetar las opiniones de los demás. Sin embargo, parece ser que es imposible llegar a un acuerdo cuando dos opiniones son opuestas. Aborto sí, aborto no. Dios existe, Dios es una mentira. Parecen ser caminos que nunca encontrarán una intersección, un punto compartido.
¿Cómo se puede lograr que exista justicia para todos si es imposible determinar qué es lo universalmente justo? ¿Cómo se puede llegar al bien común, a lo que vulgarmente nombramos como "paz mundial", si ni siquiera existe un acuerdo convencional en cuanto a la justicia? ¿Puede existir un bien común si para lo que unos es un bien, para otros no lo es?
Estaría bueno que por ahí no existiese tanta diversidad de opinión. Que todos pensaran lo mismo que uno. El problema radica en encontrar a ese uno que opine lo correcto.
Y por eso mismo existe la diversidad de opinión.

No hay comentarios:

Publicar un comentario