"...en los tiempos actuales, tiempos en donde la totalidad de lo real intenta decidirse por opciones contradictorias, con lo cual la adhesión de una de ellas, implica el rechazo a la otra; como sí, la vocación cibernética de nuestro final de siglo, al desarrollar la suma de las relaciones lógico-matemáticas en códigos binarios, hubiera ya cubierto todo el espectro posible de las relaciones humanas, y por lo cual ellas también tengan que ser calificadas binariamente, dicotómicamente, sin haber lugar para puntos de comunicación entre una y otra de las alternativas. Por el contrario estamos tentados a afirmar, que cuando de las relaciones humanas se trata, la opción que se debe privilegiar es la intermedia entre ambos extremos".
Armando S. Andruet.